Tema 3: MANEJO
ADECUADO DEL CRÉDITO
El crédito es una cantidad de dinero que
recibimos con la obligación de pagarla en un plazo determinado, más una
cantidad adicional por los intereses.
Se trata de una herramienta para comprar los
bienes o servicios que se ocupen y que no se podrían adquirir en poco tiempo
sin un crédito, por ejemplo comprar una casa.
Pero los créditos también pueden meternos en
problemas si somos irresponsables con su uso: si adquirimos créditos que no podemos
pagar o si no pagamos a tiempo.
Si no pagamos podemos perder los bienes que
respaldan el crédito (casa, vehículo, embargo de salario) y nos cerraremos las
puertas para obtener nuevos créditos en el futuro.
ASPECTOS A
CONSIDERAR ANTES DE ADQUIRIR UN CRÉDITO
Capacidad de pago. Es decir si podemos pagarlo.
Para se necesita saber cuánto de nuestros ingresos podemos destinar al pago del
crédito, restando nuestros gastos a nuestros ingresos (incluyendo los pagos a
otras deudas y el ahorro). Lo que nos quede será la cantidad máxima que podemos
destinar al pago de nuevas deudas sin riesgo de incumplir con los pagos a
deudas ya adquiridas.
Comparar las tasas de interés. Así como
comparamos precios al comprar un televisor; al tomar un crédito es
conveniente comparar distintas opciones. El precio de un crédito es su tasa de
interés, entre más alta sea, más caro será el crédito.
TIPOS DE CRÉDITOS
Existen diferentes tipos de crédito, algunos de
los cuales, por su finalidad pueden ser útiles.
Crédito para micro o pequeña empresa o crédito
para negocios. Es un préstamo para iniciar o hacer crecer un negocio, por
ejemplo, comprar productos para abrir una soda,
un mini-súper, una tienda de ropa o comprar un taxi, entre otros.
Crédito a la vivienda o hipotecario. Permite
adquirir una casa y pagarla poco a poco, o bien reparar, ampliar o mejorar la
que ya se tiene. También sirve para adquirir un terreno.
Crédito de consumo. Es el que destinamos
para comprar bienes y servicios que satisfagan nuestras necesidades cotidianas
(cocinas, televisores, teléfonos, muebles, viajes). Los créditos de consumo son
los más caros que existen, sobre todo cuando se adquieren con prestamistas,
tiendas de electrodomésticos o con agencias de viajes.
LA TARJETA DE
CRÉDITO
Es el tipo de crédito más utilizado en nuestro
país. Con ella se pueden realizar compras en comercios sin cargar efectivo.
Cuando contratamos una tarjeta de crédito se nos presta una determinada
cantidad, llamada línea de crédito, la cual, se paga posteriormente, más los
intereses correspondientes.
La tarjeta es en algunos momentos el único
medio para satisfacer nuestras necesidades básicas, pero debemos saber
utilizarla para no caer en el sobre-endeudamiento y morosidad. Para ello, se
debe pagar antes de la fecha límite -y de ser posible- el total de lo gastado.
La tarjeta de crédito debe ser utilizada solo
como medio de pago y no como medio para consumo. Si se tiene más de una tarjeta
de crédito, es mejor investigar cuál ofrece la mejor tasa de interés y usar
solo esa.
¿Cuándo conviene endeudarse y cuánto no?
Primero se debe tener claro el monto requerido para cubrir la necesidad
inmediata, no más y comparar las distintas opciones.
Sí conviene. Cuando lo que vamos a
comprar con el tiempo aumentará su valor, como: un terreno, una casa, un
negocio propio, estudio o imprevistos como una emergencia médica.
No conviene. Cuando va a endeudarse para
comprar artículos que rápidamente se deterioran o pierden su valor como: ropa,
pantallas, celulares, salidas a comer o viajes.
Tampoco conviene pedir prestado para pagar otro
préstamo (salvo que sea más barato), ni gastar más de la tercera parte de los
ingresos en pagar deudas.